Dos estudios relacionados evalúan la viabilidad de la implicación del personal de las residencias para reducir la frecuencia de la depresión en las personas mayores en régimen de residencia. La formación en salud mental se proporcionaba al personal a través de los miembros del Equipo de Salud Mental Comunitaria para los Mayores. El programa de investigación empleó métodos cualitativos y cuantitativos para evaluar los efectos de una formación teórica del personal, un sistema de tutorías con el fin de reforzar la formación y un plan de intervención para la gestión de los problemas de depresión, todo esto combinado con un acercamiento psicosocial y médico.
El programa de formacion fue positivamente evaluado por los destinatarios, los formadores y los investigadores. La habilidad del personal de cuidados para detectar la depresión mejoró significativamente y la depresión se redujo en 7 de los 8 residentes deprimidos que participaron en el plan de intervención. Esta investigación sugiere que la intervención psicosocial, que implica una colaboración entre cuidadores y residentes, apoyados por el Equipo de Salud Mental Comunitario, puede tener un importante papel que desempeñar en el apoyo a la gestión médica de la depresión en residencias asistidas.
Resumen extraído del Boletín de Información Sociolaboral Internacional (2004, enero) 102