Objetivos. Describir las alteraciones sueño-vigilia en la enfermedad de Alzheimer y en la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, así como analizar su utilidad diagnóstica. Desarrollo. Los pacientes con enfermedad de Alzheimer padecen sueño fragmentado, con incremento del tiempo de vigilia y descenso del sueño lento profundo y del sueño REM. Estas alteraciones se acentúan con la progresión de la enfermedad y con el deterioro cognitivo.
En la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, los estudios polisomnográficos muestran un patrón cíclico en el que se alternan los complejos periódicos y actividad theta o theta-delta. Estos cambios cíclicos se modifican con la progresión de la enfermedad y desaparecen antes de la muerte.
Conclusiones. Las alteraciones del sueño son habituales en los pacientes con estadios moderado a grave de la enfermedad de Alzheimer; estas alteraciones son inespecíficas e insuficientes para establecer un diagnóstico precoz. En la fase inicial de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, las alteraciones sueño-vigilia son constantes y preceden a los complejos periódicos observados en vigilia; posteriormente, en el curso evolutivo, aparecen cambios cíclicos específicos.
Resumen tomado de la revista