Un estudio refleja la doble discriminación que sufren en Andalucía las mujeres con discapacidad

Fecha

19/03/2012

Medio

Facebook
Twitter
LinkedIn

Un estudio, editado por la Junta de Andalucía y elaborado por la Federación de Asociaciones para la Promoción de la Mujer con Discapacidad Luna Andalucía, refleja, según los datos aportados por las 3.347 mujeres con discapacidad han participado en esta investigación, la doble discriminación que este colectivo sufre en Andalucía.

El director general de Personas con Discapacidad, Gonzalo Rivas, y la delegada en Córdoba de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social, Silvia Cañero, han asistido este lunes en Córdoba a la presentación del ‘Autodiagnóstico de la situación de las mujeres con discapacidad en Andalucía’, una investigación que parte de la premisa de que la interacción de varios factores discriminatorios, como son el género y la discapacidad, generan una situación específica que incide negativamente sobre la calidad de vida de las mujeres con discapacidad. Así, para tratar de arrojar luz sobre esta hipótesis se ha entrevistado a 3.343 mujeres con discapacidad física u orgánica de las ocho provincias andaluzas, de las que 397 son cordobesas.

Los datos extraídos en los campos analizados reflejan, según Gonzalo Rivas, la necesidad de seguir trabajando en el fomento de la igualdad de oportunidades, ya que aunque se ha avanzado gracias al desarrollo de iniciativas como el Programa ‘Mujer, empleo y discapacidad’, los distintos indicadores señalan la existencia de esa discriminación.

Así, el estudio pone de manifiesto que el porcentaje de analfabetismo total entre las mujeres con discapacidad es del diez por ciento, mientras que el analfabetismo funcional se dispara hasta el 30 por ciento. Se concluye también que seis de cada diez mujeres con discapacidad solo han superado el nivel de graduado escolar o ESO y que únicamente el once por ciento son licenciadas o diplomadas, aunque la mayoría adquirió la discapacidad después de finalizar sus estudios superiores.

Otro dato destacable es que, a pesar de los múltiples obstáculos que tienen que superar estas mujeres, el 79 por ciento afirma tener buena autoestima. La idea preconcebida de que las mujeres con discapacidad son siempre personas dependientes queda desterrada, ya que el 60 por ciento de ellas tiene una o más personas a su cargo, independientemente del grado de discapacidad. Además, el 74 por ciento de las entrevistadas cuenta con ingresos propios, procedentes de salarios o pensiones pero, en el 66 por ciento de los casos, dichos ingresos son inferiores al Salario Mínimo Interprofesional.

En cuanto al eje de empleo, cabe destacar que el 78 por ciento de las mujeres con discapacidad se encuentran en situación de desempleo y, de ellas, el 41 por ciento son consideradas inactivas, es decir, ni trabajan ni demandan empleo.

El estudio aborda también la participación de las mujeres con discapacidad en la vida social. Más de la mitad de las mujeres entrevistadas, un 57 por ciento, participa en organizaciones sociales especializadas en temas de discapacidad, aunque en dichas organizaciones solo cuatro de cada diez puestos directivos están ocupados por mujeres.

Es reseñable igualmente, en cuanto a su grado participación social que, el 40% de las mujeres entrevistadas destacan el hecho de que los lugares de ocio y las actividades de tiempo libre disponibles en su entorno no son accesibles o que el 39 por ciento no tenga acceso a Internet.

La accesibilidad es un eje transversal que forma parte del contenido esencial de todos los derechos y por eso se ha concebido como un vector que atraviesa todo el estudio. Como dato relevante en esta línea hay que resaltar que el 71 por ciento de las entrevistadas no cuenta con adaptaciones en sus hogares y vive, por lo tanto, en un espacio no accesible, lo que es un factor de exclusión fundamental a tener en cuenta.

Quizás te interese:

¿Quieres recibir noticias en tu email?