Turespaña, en colaboración con algunas autonomías, ha invertido en el último lustro cerca de cinco millones de euros en fomentar y mejorar la experiencia de los turistas que tengan alguna discapacidad y así “facilitar el acceso a todo el mundo”.
Durante la celebración de la 44ª edición de la Feria Internacional de Turismo Fitur, celebrado esta semana en Madrid, el sector turístico ha puesto de relieve la necesidad de facilitar el turismo a todo el mundo. En particular, las empresas participantes han puesto el foco en la accesibilidad para hacer “un turismo accesible para todos”.
En el tercer trimestre de 2023 se realizaron un total de 60,6 millones de viajes, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). En concreto, los destinos más visitados por los españoles fueron los territorios nacionales, con Andalucía a la cabeza, con más de 10,8 millones de visitas, seguida de Cataluña, con 7,7 millones y la Comunidad Valenciana, que recibió 6,8 millones de turistas.
La accesibilidad en los destinos nacionales se ha visto fomentada por la colaboración entre los destinos y Turespaña. En concreto, el organismo de promoción turística invirtió, en colaboración con las comunidades autónomas, más de cinco millones de euros para fomentar la accesibilidad de los territorios, así como la creación de portales especializados de consultas.
Respecto al fomento del turismo accesible, fuentes de Turespaña apuntaron a Servimedia que “se han desarrollado diferentes líneas de actuación como adaptar monumentos que no eran accesibles, así como en paradores”.
En cuanto a la creación de portales especializados de consulta, las mismas fuentes destacaron que se ha trabajado en mejorar los existentes, aportando mayor detalle y información para “hacer más fácil el turismo a las personas con discapacidad”, así como la creación de dichas páginas web en aquellas autonomías que todavía no contaban con una propia.
Las comunidades autónomas también desarrollaron planes para facilitar el acceso al turismo a este colectivo, así como en la adaptación de diferentes áreas como el transporte o el acceso a establecimientos.
Un ejemplo de ello es Cataluña, que destinó estos últimos cuatro años más de 10,5 millones de euros para adaptar algunas estaciones de metro que hasta entonces no eran accesibles, como Plaza España, un gran núcleo urbano y un punto de la red de metro de la ciudad condal que ha sido un centro de gran reivindicación por su importancia en el transporte público de la ciudad.