La Coordinadora Española de Asociaciones de Espondilitis organizará en Salamanca desde este viernes hasta el domingo, 9 de mayo, el I Congreso Internacional de Espondilitis, con motivo del Día Mundial de las Espondiloartropatías, que se celebra mañana, 8 de mayo, un evento que contará, entre otros, con los nadadores David Meca y José Antonio Aráez.
La espondilitis anquilosante es una enfermedad reumática altamente discapacitante que afecta a unas 200.000 personas en España. Se trata de una patología muy poco conocida entre la población, a pesar de que sus efectos son muy visibles.
Según el profesor de Reumatología en la Universidad de Salamanca y jefe del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de esta ciudad, el doctor Javier del Pino, «la mayoría de los enfermos con espondilitis ven mermada su calidad de vida al sufrir grandes dolores y algún grado de discapacidad, siendo el curso de la enfermedad impredecible».
«Se estima que entre el 60 y el 65 por ciento de ellos tiene una minusvalía del 33 por ciento, mientras que un 10 por ciento evoluciona hacia una forma completamente invalidante», aseveró.
La actividad física, en concreto la natación, es una de las actividades más recomendadas en su tratamiento diario de rehabilitaión.
«El pilar más importante en el tratamiento de la espondilitis es la rehabilitación permanente, es decir, la realización de ejercicios físicos reglados y ejercicios respiratorios orientados a fortalecer la espalda, para evitar la rigidez y la pérdida de movilidad de la columna vertebral», apunta.
«La práctica deportiva que permita la extensión de la espalda y que mantenga la movilidad de los hombros y caderas es muy recomenble. Y dentro de los deportes, la natación es el mejor ejercicio, porque con ella se ejercitan de una forma equilibrada todos los músculos y articulaciones de la espalda», añade este experto.
EL DEPORTE, LO MEJOR CONTRA EL DOLOR
Para el presdiente de la Coordinadora Española de Asociaciones de Afectados de Espondilitis (CEDADE), Manuel Puparelli, el deporte, en algunas de sus vertientes, es «la terapia más eficaz para contraestar los dolores». «Hay que estar siempre en movilidad, ya que con el ejercicio, contrariamente a las dolencias puntuales de espalda producidas por algún movimiento brusco, se alivian los síntomas», anota.
«Concretamente, la natación es recomendada y practicada por muchos pacientes de espondilitis para nuestra recuperación. Lo único que reclamamos a las autoridades son más instalaciones y facilidades para poder llevar a cabo esta recuperación», insiste.
En el Congreso Internacional de Espondilitis que arranca este viernes en Salamanca participarán dos nadadores de élite, cada uno en su especialidad: David Meca, en natación en mar abierto, y José Antonio Aráez, varias veces campeón de España para nadadores discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar. y único nadador con espondilitis en el mundo que practica un estilo libre único.
Para David Meca, la natación fue también la solución a sus problemas infantiles de salud. «Empecé a nadar a los tres años de edad por indicación médica. Era un niño con muchos problemas físicos y de salud. Tenía asma, escoliosis y falta de tono muscular, que además me obligaba a llevar botas ortopédicas», cuenta.
«Los médicos consideraron que la natación podría ayudarme a corregir estos defectos. Cuando empecé a progresar y a potenciar mis capacidades en el agua me fui superando a mi mismo poco a poco y en mi interior llegué a plantearme un sueño, ser campeón del mundo. Lo que comenzó como una obligación se convirtió con el paso del tiempo en mi profesión, mi pasión y el eje de mi vida», explica este nadador.