Más del 50% de las empresas catalanas cree en las capacidades de los trabajadores con discapacidad

Fecha

28/02/2012

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Los datos del último Observatorio SIFU de Empresa y Discapacidad desvelan, entre otras cosas, que aunque las empresas catalanas apuestan más por las medidas alternativas que por la contratación directa de trabajadores con discapacidad, las empresas catalanas defienden la igualdad de oportunidades y capacidades del colectivo de personas con discapacidad.

Más del 95% de las empresas catalanas con más de 50 empleados, conoce la Ley de Integración Social de Minusválidos (LISMI), y a pesar de ello, el 14% reconoce no cumplirla. A nivel nacional, las empresas consideran que más ayudas económicas a las empresas sería el primer factor que ayudaría a fomentar el cumplimiento de la ley entre las empresas. Aunque las empresas catalanas también lo consideran un factor importante, sólo el 40% lo posiciona como primera medida, por detrás de Madrid (39%), y muy lejos de Aragón, la comunidad con el apoyo más elevado (54%).
En contra posición, más del 21% de las empresas catalanas destacan por considerar que la implementación de planes formativos de personas con discapacidad ayudaría al cumplimiento de esta ley, a nivel nacional, este porcentaje es de un 18%.

El 41% de las empresas catalanas que cumplen la LISMI lo hacen contratando directamente personal con discapacidad en su plantilla, un 16% aplicando medidas alternativas exclusivamente, siendo de los porcentajes más altos a nivel nacional, y un 30% a través de las dos prácticas a la vez. Los datos del Observatorio SIFU de Empresa y Discapacidad dejan entrever que la información sobre la LISMI y las diferentes formas de cumplirla, llega a los departamentos de recursos humanos de las empresas con todo detalle, ya que un elevado número de las empresas entrevistadas afirma conocer las bonificaciones o subvenciones que pueden recibir por la contratación de personas con discapacidad, y más del 70% afirma conocer las medidas alternativas.

Cataluña es la tercera comunidad autónoma que más aplica las medidas alternativas, por detrás de Navarra y Andalucía. Entre estas medidas, la compra de servicios o productos a CEE o donaciones son las más aplicadas. Aunque Cataluña sea una de las comunidades donde las empresas consideran que no tienen o no han tenido ningún problema para cumplir con la LISMI, donde el 93% de las empresas entrevistadas está muy satisfecha con el rendimiento del trabajador con discapacidad y donde el 90% afirma que la incorporación de personas con discapacidad ha favorecido el trabajo colectivo, sólo el 35% de las empresas afirma cumplir la Ley por política de empresa.

El puesto de trabajo con más salida para el colectivo de personas con discapacidad, según la opinión de los empresarios catalanes, es la de operario. El 61% de las empresas entrevistadas confirma que alguna vez ha contratado personal con discapacidad para una vacante de operario, el 54% como administrativo y sólo el 10% para cargos directivos o intermedios.

Grupo SIFU realiza este estudio periódicamente para poder valorar la tendencia de la situación de integración laboral de personas con discapacidad. Por este motivo, se incluye la pregunta “¿Qué dificultades encuentra la empresa para cumplir la LISMI?”. En el caso de esta autonomía, 4 de las 6 principales dificultades propuestas, superan las valoraciones medias nacionales, destacando un elevado 8% que lo atribuye a la complicación de los trámites (mucho papeleo), y un 4% al desconocimiento del colectivo de personas con discapacidad por parte de la empresa.

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