El Barómetro Sanitario de 2023 muestra que la satisfacción de la población general con el sistema sanitario público es de 6,27 puntos, valoración que parece estabilizarse tras su descenso en 2022 (6,26) respecto a la situación prepandémica en 2019 (6,74).
Los servicios mejor valorados son las urgencias del 112/061, así como los ingresos y asistencia en hospitales públicos, con 7,42 y 7,23 puntos, respectivamente. En todos los dispositivos asistenciales se supera la nota de 6 puntos sobre 10.
Los servicios de Atención Primaria se valoran con un 6,37 en el caso de las consultas con los médicos de familia en los centros de salud, y con un 6,35 los servicios de urgencias de Atención Primaria.
Las consultas de atención especializada son valoradas con 6,04 puntos y las urgencias de los hospitales públicos con 6,23 puntos.
El 56,7% de la población opina que el sistema sanitario de nuestro país, en general, funciona bastante bien o que funciona bien, aunque son necesarios algunos cambios. Tras el marcado descenso de esta percepción entre 2019 (71,4%) y 2022 (57,1%), se observa ahora cierta estabilización en este indicador.
Las personas que opinan que el sistema sanitario funciona mal y necesita cambios profundos se mantiene igualmente estable, con un 14,3% en 2023, frente al 14,5% de 2022.
El 43,5% de los ciudadanos piensa que sigue igual el problema de las listas de espera hospitalarias; el 33,9% piensa que ha empeorado en los últimos 12 meses; y el 11,3% piensa que ha mejorado.
En esta edición, el Barómetro Sanitario se interesa por cómo sienten los ciudadanos que les está afectando la situación de los centros de Atención Primaria que se refleja en la opinión pública. El 22,1% refiere que les está afectando mucho o bastante, frente al 21,9% que piensa que algo y el 53% que refiere que nada o casi nada.
Respecto a la necesidad de aplicar determinadas medidas en el ámbito de la Atención Primaria, se señalan como las más importantes que las personas mantengan al mismo/a médico/a de familia de forma estable si están satisfechas (9,2); aumentar las plantillas de personal sanitario (9,1); y dedicar más recursos económicos (9). Otras medidas, como aumentar el tiempo de consultas o mejorar las instalaciones y medios tecnológicos, se sitúan en torno a 8 puntos.
El Barómetro Sanitario es un estudio de opinión que viene realizándose, con una periodicidad anual, desde 1993 por el Ministerio de Sanidad con el Centro de Investigaciones Sociológicas. Permite conocer la opinión, tanto de la población general como de las personas que han sido atendidas en la sanidad pública, para tomar en consideración sus expectativas y su valoración, como elementos importantes para establecer las prioridades de las políticas de salud.
Opinión de las personas que utilizan los servicios del SNS
Respecto a la valoración de las personas que han hecho uso efectivo de los servicios del Sistema Nacional de Salud en los 12 meses previos y que, por lo tanto, tienen experiencia de uso de los mismos, el Barómetro muestra, en general, una buena opinión sobre la atención recibida.
Atención Primaria
Las tres cuartas partes de la población de 18 y más años ha acudido a Atención Primaria en el último año. Para el 78,6% la atención fue presencial, frente al 66,9% de 2022, incremento relacionado con el descenso de las consultas telefónicas (del 31,3% al 19,9%).
Un 21,1% de los pacientes fueron atendidos en el día o al día siguiente. El 69,8% refirió que pasó más de un día porque no había cita antes, mientras que para un 5,3% pasó más de un día porque le interesaba o le venía mejor.
Las personas que tuvieron que esperar más de un día porque no había cita disponible, tuvieron una demora media de 9,12 días para ser vistos.
El 81,4% de las personas que han utilizado los servicios de Atención Primaria manifiestan estar satisfechas con la atención recibida, aumentando ligeramente respecto a 2022 (79,7%).
Los aspectos mejor valorados son la confianza y seguridad que les merecen los profesionales de enfermería (8 puntos) y medicina (7,8 puntos), seguidos del conocimiento y seguimiento de sus problemas de salud y de la información recibida (en torno a 7,5 puntos en ambos). El tiempo dedicado por el/la médico/a se valora con 6,8 puntos.
Atención especializada ambulatoria
El 47,8% de las personas entrevistadas refiere haber consultado un especialista del segundo nivel asistencial de la sanidad pública en los últimos 12 meses y el 82,8% valora positivamente la atención recibida.
Un 42,3% acudió a estas consultas por indicación del médico de Atención Primaria y el 55,4% por citación del propio médico/a especialista tras una consulta anterior.
El 38,2% de las personas remitidas desde Atención Primaria refirieron tiempos de espera de más de 3 meses, sin cambios relevantes respecto a 2022.
Los aspectos mejor valorados son la confianza y seguridad que trasmite el/la especialista (7,8) y la información recibida sobre su problema de salud (7,7). El tiempo dedicado por el/la médico/a cada persona se valora con 7,2 puntos.
Atención Hospitalaria
El 9,1% de las personas entrevistadas refiere haber estado ingresado en un hospital público en los últimos 12 meses. El 40,9% de los pacientes lo hizo de manera programada para una cirugía o prueba diagnóstica; el 54,1% ingresó por una enfermedad o problema de salud; y el 4,5% por un parto.
El 89,6% de los pacientes valora positivamente la atención recibida (buena o/y muy buena) durante su ingreso en un hospital público.
Los aspectos mejor valorados son los cuidados de los diferentes profesionales (enfermería 8,5 puntos y medicina 8,4 puntos).
El aspecto menos valorado (7,2 puntos) es el número de personas que comparten habitación, que aun así se sitúa en una puntuación positiva.
Urgencias
El 39% de las personas entrevistadas refiere haber acudido a un servicio de urgencias de la sanidad pública en el último año.
Las personas usuarias de los servicios de urgencias declaran un patrón medio de frecuentación de 2,7 veces al año. Un 12% manifiesta haber acudido 5 o más veces en este periodo.
Los dispositivos de urgencia de la Atención Primaria recibieron aproximadamente el 44,4% de la demanda de atención urgente. Los servicios de urgencia hospitalarios recogieron el 49,7% de la demanda, tanto espontánea como derivada desde otros dispositivos asistenciales, y el 4,7% acudió a un servicio de urgencias 112 / 061
Para la mitad de los pacientes (47%) el tiempo de permanencia en la urgencia fue entre 1 y 4 horas; para un 26,1% el tiempo fue inferior a 1 hora, mientras que el 2,4% permaneció en el servicio de urgencias 24 horas o más.
El 75,2% de las personas que habían utilizado los servicios de urgencias públicos valora positivamente la atención recibida.
Coordinación entre niveles asistenciales
El Barómetro Sanitario explora la opinión de la población general sobre la comunicación y coordinación entre la Atención Primaria, los centros de especialidades y los hospitales.
El 40,5% concede una valoración positiva de esta coordinación y cree que es buena o muy buena, recuperándose ligeramente respecto a 2022 (39,4%). El 24,1% opina que es mala o muy mala y el 29,4%, que es regular.
Este es otro indicador que empeoró sensiblemente en 2022 respecto a la situación pre-pandémica, cuando se situaban en cerca del 50% quienes pensaban que la coordinación entre niveles era buena o muy buena.
Preferencias de proveedor sanitario
Con el fin de conocer sus preferencias, el Barómetro Sanitario explora la opción que tomarían las personas, en el caso de poder elegir, entre un centro público o privado donde ser atendidos en los distintos niveles asistenciales, basándose en su percepción, fruto tanto del conocimiento y experiencias como de la información o las referencias con que cuenten.
Como en años anteriores, sigue manteniéndose una clara preferencia por los centros públicos para los cuatro niveles asistenciales que se analizan: atención primaria (70%), atención especializada (57,2%), hospitalización (75,8%) y urgencias (72,5%).
Desde 2015 se ha producido un aumento de la población que declara disponer de un seguro privado. Un 21,5% de las personas entrevistadas refieren disponer de un seguro médico privado contratado de manera individual y un 9,4% contratado por su empresa. El 75,5% de las personas que declaran disponer de un seguro privado contratado individualmente manifiestan como principal razón para contratar ese seguro la “rapidez con que le/la atienden”.
Servicios de historia clínica y receta digital del SNS
El 56,9% de las personas saben que pueden consultar la historia clínica electrónica de su servicio autonómico de salud y el 34,8% accede a la misma. Un 13,6% manifiesta que no sabe o no puede utilizar Internet.
El 63% desconoce que los médicos de otra comunidad autónoma pueden consultar electrónicamente sus informes clínicos si tuvieran que prestarles asistencia sanitaria y que cada persona puede, igualmente, consultar sus informes clínicos interoperables que existan en el conjunto del Sistema Nacional de Salud
A su vez, un 25% de la población manifiesta haber hecho uso del servicio de interoperabilidad del SNS de receta electrónica, que permite obtener los medicamentos en cualquier farmacia del país.