Será pasado algo más de este mediodía cuando la consejera de Sanidad, Verónica Casado, y el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, comuniquen oficialmente la decisión tomada tras reunirse el martes y ayer con «sus» expertos y con los representantes del Ministerio de Sanidad, pero todo indica que no sólo Castilla y León pasará a la fase 3 el próximo lunes -como solicitó al ministro Illa- sino que lo que hará además con menos restricciones -incluso sin ellas- de las que ya el domingo habló el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.
Los «muy buenos» datos epidemiológicos de los que por fin hacia gala Casado en su comparecencia del martes se confirmaron ayer con sólo tres nuevos contagios confirmados en 24 horas. Por este motivo, y según ha podido saber ABC, salvo que surja algún problema en alguna zona concreta de la Comunidad, el anuncio de la Junta será el dar el visto bueno a la movilidad entre todas las provincias de Castilla y León, con la posibilidad incluso de que alguna de las del norte que limitan con otra región puedan también desplazarse a esos territorios y recibir a sus ciudadanos.
No a así con el sur, esto es, con Madrid, donde la Junta siempre ha mostrado sus mayores preocupaciones, pues el elevado número de casos en provincias como Segovia o Soria está directamente vinculado a esa movilidad. El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso no ha solicitado pasar a fase 3 de forma adelantada y, por lo tanto, tendrá reducida la movilidad a la propia comunidad.
