Las Cortes Generales de la XV Legislatura contarán con nueve políticos vinculados estrechamente con la discapacidad, lo que supone un pequeño aumento con respecto a las últimas elecciones generales celebradas en noviembre de 2019, cuando fueron elegidos ocho parlamentarios en el Congreso y el Senado comprometidos de forma personal con los derechos de este colectivo.
Las listas elegidas en los comicios del pasado 23 de julio contienen ocho diputados y dos senadores que están relacionados de forma personal, familiar o laboral con la discapacidad. Entre los nombres electos hay cinco representantes del PP, tres del PSOE y uno de Vox, cuatro de los cuales se incorporan a las cámaras en esta legislatura. Sin embargo, desaparece Pablo Echenique tras más de cuatro años en el Congreso.
DISCAPACIDAD DIRECTA
Entre todos los parlamentarios con vínculos hay tres que cuentan con discapacidad. Uno de ellos es Emilio Sáez, exalcalde de Albacete y diputado del PSOE por la circunscripción de Albacete, que tiene discapacidad como consecuencia de una poliomielitis. Este dirigente socialista, manchego pero almeriense de nacimiento, fue vicepresidente del Cermi y responsable en la ONU de las personas con discapacidad de la zona europea, además de ostentar otros cargos en el tercer sector de la discapacidad.
Sáez llega ahora al Congreso con intención de “aportar” su bagaje político y de ayudar al sector de la discapacidad, según explicó a Servimedia durante una entrevista en la campaña electoral. Entonces recalcó que es importante visualizar la discapacidad en todos los sectores de la sociedad porque “normaliza la situación” de estas personas.
También puso en valor la posibilidad que ofrece un escaño para tener “hilo directo” con los políticos y defendió la presencia del colectivo en política porque es “donde se consiguen las mejoras y los logros”.
La bancada socialista también contará la presencia de Begoña García Bernal, diputada electa por Cáceres, que tiene un 25% de visión a consecuencia de un coloboma. Hasta las elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo, era consejera de Agricultura en la Junta de Extremadura, donde ha estado ocho años desempeñando estas competencias hasta la pérdida del poder en las urnas. Ahora llega al Congreso como diputada tras encabezar la lista del PSOE por la provincia de Cáceres.
Otro caso distinto es el del popular Manuel Cobo, que tuvo que someterse a un doble trasplante de pulmón por las secuelas de un accidente de moto en 2011, cuando era vicealcalde de Madrid. A pesar de su situación física, fuentes cercanas aseguraron a Servimedia que no cuenta con un reconocimiento oficial de discapacidad porque no lo ha solicitado formalmente.
DISCAPACIDAD EN LA FAMILIA
Por su parte, la diputada Sandra Moneo del PP y los senadores María Salom y Juan José Matarí, todos ellos del PP, se encuentran entre los representantes políticos que están relacionados con el ámbito de la discapacidad por razones familiares. Sandra Moneo tiene un hijo con Síndrome de Down, igual que en el caso de Matarí, con una hija de 25 años. Por su parte, Salom tiene un hijo con hemofilia.
A ellos se suma la diputada de Vox por Almería Rocío De Meer, que tuvo un hijo con Síndrome de Down. De Meer, que además ha sido portavoz de Vox en comisiones relacionadas con la discapacidad, reivindicó cambios en el tratamiento que hace la sociedad sobre la discapacidad durante una entrevista electoral para Servimedia. La diputada aseguró que hay «falta de educación» y subrayó la necesidad de cambiar hacia «una mirada social de cariño, de aceptación y de amor» de la discapacidad.
EXPERIENCIA EN EL TERCER SECTOR
Además de los representantes con vínculos personales y familiares, también hay otros parlamentarios en la XV Legislatura cuya carrera profesional ha estado ligada con la discapacidad. Entre ellos se encuentran Violante Tomás, diputada del PP electa por Murcia, que fue gerente de Plena inclusión en la Región hasta 2011 y miembro del Consejo Sectorial de Personas con Discapacidad dentro del Área de Servicios Sociales de la Región de Murcia.
Similar es el caso de Rafaela Crespín, diputada del PSOE por Córdoba, que es diplomada en Magisterio Especial y que puso en marcha una unidad de estancia diurna para personas con discapacidad en La Carlota (Córdoba).
Entre las ausencias en la nueva legislatura, destaca la marcha del hasta ahora portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, con una gran discapacidad muy visible fruto de una atrofia muscular espinal que le obliga a desplazarse en una silla de ruedas motorizada. En su caso, ni siquiera entró en las listas de Sumar, lo que le llevó a denunciar públicamente que había sido vetado por Yolanda Díaz al igual que la ministra Irene Montero.