¿Te sientes cansado?, ¿tienes una sensación constante de tener sed o hambre?, ¿se te entumecen las manos y los pies? Estos síntomas pueden significar un exceso de glucosa en la sangre que, a su vez, puede derivar en diabetes. En Castilla-La Mancha, esta enfermedad afecta a 290.000 castellano-manchegos, lo que supone un 14 por ciento de la población, de los cuales unos 15.000 son diabéticos tipo 1 y el resto tipo 2, aunque, un 40 por ciento de estos últimos no está dignosticado.
Un trastorno metabólico que «avanza de forma silenciosa», según reconoce la presidenta de la Federación de Asociaciones de Diabéticos de Castilla-La Mancha (Fedicam), en una entrevista con Europa Press, ya que a menudo muchos pacientes desconocen que lo sufren al no presentar los signos de alarma, tales como hambre, sed, fatiga o necesidad de orinar con frecuencia.
Para hacer frente a esta patología, desde la asociación reivindican la necesidad de mejorar la calidad de vida de los que padecen esta enfermedad crónica a través de «una buena formación y mejores sistemas de monitorización». Es por ello que reclaman una mayor dotación económica para «no limitar» los avances en la investigación de la diabetes, dado que, según María José Salmerón, «en los últimos años, esta inversión se ha ido reduciendo».
En esta labor de «humanizar» la enfermedad, el Gobierno regional puso en marcha en diciembre de 2016 la Escuela de Salud y Cuidados de Castilla-La Mancha y el aula de diabetes. En estos tres años se han realizado 17 talleres relacionados con esta patología, en los que se han formado a más de 200 pacientes.
La Jefa de Servicio de Participación y Apoyo a la Iniciativa Social de la Consejería de Sanidad, Fuencisla Iglesias, señala que entre los retos del Gobierno regional destaca la formación en educación diabetológica para profesionales, pacientes y familiares, como parte fundamental en el tratamiento. «Continuar fomentando los talleres de la Escuela de Salud y Cuidados alcanzando a más población diabética; incorporar otras actividades de educación para la salud con la finalidad de que haya un mejor conocimiento de la enfermedad con la incorporación de hábitos saludables para conseguir un aumento de la confianza y de la autoestima de los pacientes a través de su participación, responsabilidad y actividad dándoles protagonismo en la toma de decisiones; tratar de mejorar la relación paciente -profesional sanitario y alcanzar una racionalización de los recursos sanitarios con disminución de bajas laborales, ingresos hospitalarios, visitas a urgencias…».
Las nuevas tecnologías juegan un papel importante a la hora de hacer más fácil la vida al paciente. Entre estos avances tecnológicas recalca la comercialización de un sensor conectado al móvil que permite a los diabéticos medir y anticiparse a una subida o bajada de azúcar sin tener que pincharse. Además el simple escaneo también «mejora la comunicación» entre el profesional sanitario y el paciente
Gratuidad de los parches
El Gobierno regional anunció que pondrá en marcha, a partir del 1 de diciembre, la gratuidad de los sistemas de monitorización de glucosa a pacientes con diabetes tipo 1. Así, y partir de esa fecha podrán beneficiarse de esta gratuidad los pacientes diabéticos con hipoglucemias de repetición y pacientes con discapacidades o limitaciones funcionales graves, que les imposibilite realizar punciones digitales o con trastornos cognitivos que les impida expresar la situación de hipoglucemia.
Castilla-La Mancha fue la primera región en facilitar esta prestación asistencial en el país, y permite a los pacientes hacer el seguimiento de sus niveles de glucosa con una reducción considerable en el número de pinchazos.