Las dificultades de comunicación que presentaban algunos de sus alumnos han llevado al Colegio de Educación Especial Virgen del Castillo de Zamora a diseñar todo un panel de tableros de comunicación a través de pictogramas que favorece la inclusión. El proyecto, denominado Zamora Inclusiva, no sólo ayuda a escolares con dificultades comunicativas por discapacidad intelectual, autismo o trastorno generalizado del desarrollo, sino que también elimina barreras comunicativas de personas con problemas auditivos y de habla e incluso sirve, por ejemplo, para que alguien que desconoce totalmente el idioma español pueda realizar tareas cotidianas sin necesidad de echar mano de ‘Google Translate’.
El proyecto desarrollado por el centro público, el único de la provincia específico de Educación Especial, se basa en un centenar de pictogramas informativos que permiten a estas personas con problemas de comunicación identificar y desenvolverse de forma autónoma en comercios, servicios, administraciones, bibliotecas, centros de salud y otros lugares públicos a los que se necesita acceder en el día a día. Esos pictogramas identificativos, diseñados por Arasaac (Centro Aragonés para la Comunicación Aumentativa y Alternativa Arasaac), han servido de base para el proyecto, que a esa señalización especial mediante pictogramas ha añadido un código QR desde el que se da acceso a un tablero de comunicación básico, también a través de pictogramas interactivos, donde una voz indica a lo que se refieren cuando se pulsa en ellos.
La colocación de pictogramas identificativos de los comercios se ha iniciado en el barrio de Pinilla, donde se ubica el centro educativo, y luego se ha extendido al resto de la ciudad, donde medio centenar de establecimientos cuentan a la entrada con un pictograma que los identifica como farmacia, quiosco, cafetería, carnicería, supermercado o el tipo de negocio o servicio que sea. A través del código QR que figura junto al pictograma, el usuario puede acceder a un panel de comunicación específico de ese establecimiento. Por ejemplo, en una piscina, el tablero de comunicación incluye pictogramas de los días de la semana, los números, acciones básicas como quiero o necesito y las principales actividades comunicativas relacionadas con este centro deportivo, como nadar, entrada, carnet, vestuario, piscina, gorro, chanclas, bañador o toalla. Tocando los pictogramas del panel el usuario puede indicar que quiere una entrada o el personal de las instalaciones le puede advertir, por ejemplo, de que debe usar gorro en la piscina y chanclas para moverse por el recinto. De esta forma se favorece la autonomía de los alumnos y de cualquier persona con capacidades diversas.
Refugiados de Ucrania
El sistema es útil para que a través de él se comuniquen personas que desconocen el idioma español por completo, como ha podido ser el caso de algunos de los refugiados llegados de Ucrania. También pueden usarlo otros colectivos con problemas de habla o dificultades de comunicación, como quienes han sufrido un ictus o un accidente grave, quienes tienen problemas de audición o personas con disartria por esclerosis u otras causas.
El centro ofrece pegatinas identificativas para colocar a la entrada del establecimiento comercial a todos los que lo soliciten a través de la cuenta del proyecto en Instagram @ZamoraInclusiva. La idea es que la mayor parte de los establecimientos puedan contar con el pictograma en forma de pegatina a la entrada, ya que supone una vía de comunicación inclusiva que ayuda a los alumnos del colegio de educación especial a ser autónomos en su día a día y puede servir a cualquier persona que en un momento determinado tenga dificultades de comunicación, por la causa que sea. La iniciativa se pretende extender a toda la provincia de Zamora y desde el Colegio Virgen del Castillo están dispuestos a ofrecer apoyo para implantarla en otras provincias, tanto de Castilla y León como de España, e incluso en otros países, ya que se trata de un sistema de comunicación universal.