El primer ensayo clínico de la Terapia Antígeno Específica con células dendríticas, una técnica pionera a nivel mundial que tiene como objetivo modular las defensas del paciente con esclerosis múltiple y neuromielitis óptica, ha terminado su primera fase, la cual ha estado centrada en verificar la seguridad y ausencia de efectos adversos moderados o graves del tratamiento.
En concreto, esta primera fase comenzó hace 18 meses y ha sido realizada por un equipo de investigadores del IDIBAPS/Hospital Clinic de Barcelona, bajo la dirección del doctor Pablo Villoslada. En ella, se han incluido ocho pacientes con esclerosis múltiple y cuatro con neuromielitis óptica con un grado de discapacidad de entre 3 y 8,5 en la Escala Expandida del Estado de Discapacidad (EDSS).
En 2018 se espera ampliar el ensayo fase I a 10 pacientes más y, posteriormente, se realizarán las fases 2 y 3, previas a la aprobación del tratamiento para uso clínico.
Asimismo, la investigación, impulsada por Fundación GAEM y Obra Social La Caixa, la cual ha aportado 875.000 euros, representa un "gran avance" para la comunidad científica y para los pacientes con ambas patologías, ya que es una técnica pionera a nivel mundial que busca obtener mayor eficacia y minimizar los efectos secundarios.