– Aunque las tecnologías de la información avanzan a gran velocidad, es pronto para considerar el teletrabajo como el futuro inmediato del mercado laboral español
– Supone mayor comodidad para los trabajadores y una mejora de la organización del tiempo disponible para el trabajo y el ocio
– El teletrabajo puede llevar a la incomunicación de los empleados porque las relaciones sociales disminuirán
– La responsabilidad de la empresa se debe centrar, a pesar de la distancia física, en encontrar cauces de integración para fortalecer sus vínculos con el trabajador
TEMA
El teletrabajo es una nueva fórmula de empleo basada en las telecomunicaciones, gracias a la cual el trabajador realiza su labor lejos del empleador y del cliente. Las personas que han optado por esta variante del trabajo no se desplazan a un sitio físico, sino que hacen que el trabajo venga a ellos, a su propio domicilio o a un centro específico de teletrabajo.
Para ser teletrabajador no hay que tener conocimientos especiales, si se trata de teleempleado, la empresa decide; si se trata de teletrabajador autónomo, más que conocimientos se necesita espíritu empresarial. Esta modalidad laboral, que promete transformar el mercado de trabajo y, en buena medida, las relaciones sociales y económicas del futuro próximo, se está implantando poco a poco en nuestro país.
A España no se sabe cuándo ni cómo llegó el teletrabajo, ya que se trata de un fenómeno de individuos, por lo que es imposible saber quién fue el primer español autónomo que teletrabajó. Tampoco es fácil determinar el número actual de personas que trabajan desde su casa.
ANÁLISIS
La mayoría de los analistas consultados estima que, a pesar de que las tecnologías de la información avanzan a mucha velocidad, es pronto para considerar el teletrabajo como el futuro inmediato del ámbito laboral español. Aún es necesario realizar una auténtica revolución en la estructura, organización y metodología de una empresa o universidad para extender la utilización de estos sistemas, además de que seguirán existiendo actividades profesionales que todavía requieren la presencia del hombre en el centro de trabajo.
Por lo menos, no como futuro inmediato, porque el teletrabajo no es extensivo a todas las personas y porque actualmente todavía no se dispone de las condiciones «óptimas» para ello, según Eduardo Sánchez Illana, director de Producción, Comercialización y Empleo de la Asocicación Telefónica de Asistencia a Minusválidos (ATAM). Además, las relaciones personales continuarán siendo «muy importantes» y, según Analistas Económicos de Andalucía, en ningún caso podrán ser sustituidas «plenamente».
Sin embargo, hay tareas que pueden realizarse «por libre», como las que realiza el trabajador como autónomo y no «relacional», según José Ramón Lacosta, director de la Escuela de Negocios Foro Europeo, quien añade que posteriormente llegan los momentos de despachar, de reuniones y otras muchas tareas que precisan la presencia real del trabajador.
En España, todavía es pronto para pensar en un elevado número de teletrabajadores, ya que Europa sigue siendo más tradicional que Estados Unidos en el espacio laboral, aunque, como explicó Esther Alvarez Rodríguez, responsablde del Departamento de Salidas Profesionales de la Escuela de Negocios IDE-CESEM, la Unión Europea no cesa de relizar inversiones específicas para fomentar el teletrabajo y apuesta por la modernización de las redes de telecomunicación y por la implantación de las autopistas de la información.
Por lo tanto, las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías facilitan el hecho de que para conseguir información no es necesario desplazarse fuera del ámbito en el que vivimos, pero, para enriquecer toda esta información, es necesario el intercambio de ideas y el debate. «No podemos imaginar, aún, cursar una carrera universitaria desde el hogar, aunque en el futuro será posible», concluyó el coordinador de Servicios de Central del Teletrabajo S.L, Ramón Soler Monells.
VENTAJAS
El teletrabajo proporcionará, «fundamentalmente», una mayor capacidad para gestionar el tiempo por parte del trabajador, ya que no necesitará realizar desplazamientos para acudir a su centro de trabajo y las jornadas laborales no serán tan estrictas como en una empresa normal. Esto le permitirá, además, ahorrarse los gastos habituales de desplazamiento al mismo, según David Henche Jiménez, responsable de Marketing de Trabajadores y e-business de Alta Gestión Trabajo Temporal.
Al mismo tiempo, el teletrabajo supondrá mayor comodidad para los trabajadores y puede que se produzca una mejor organización del tiempo disponible para el trabajo y el ocio, pero no tiene porqué implicar, «de momento», una mayor eficacia o rapidez en el trabajo, según Analistas Económicos de Andalucía.
Los analistas estiman que la empresa se beneficia, sobre todo, a nivel económico e incluso puede aumentarse la productividad. Para ésta, resultará «significativa» la diferencia de coste entre mantener un centro de trabajo o «sólo» un pequeño centro de coordinación entre trabajadores.
Para el empresario, la mayor ventaja será la reducción de los costes, tales como los salariales y los inmobiliarios. Además, podrá disponer del mejor profesional para cada tarea, según Ramón Soler Monells, así como una mayor flexibilidad en las relaciones laborales, en este caso individualizadas al máximo, y el hecho de no tener problemas a la hora de ubicar los puestos de trabajo físicos en la empresa, según Unión Sindical Obrera.
Y, entre las ventajas más idílicas, se encuentran, según Esther Alvarez Rodríguez, las de conseguir países menos contaminados y un ambiente de trabajo entre familia y amigos.
En resumen, una mayor flexibilidad en la asignación del tiempo y energías, menores costes de manutención y desplazamiento y mejor calidad de vida son, según Esther Alvarez Rodríguez, responsable del Departamento de Salidas Profesionales de la Escuela de Negocios IDE-CESEM, las principales ventajas derivadas de esta nueva fórmula de trabajo.
NUEVOS MERCADOS
En la sociedad de la información y con las posibilidades que presenta, el concepto de empresa ceñida a un ámbito territorial es «obsoleto» y hoy, hasta la más pequeña empresa tiene la posibilidad, gracias a las nuevas tecnologías, de globalizarse, con la posibilidad de acceder a mercados que en otras circunstancias no le sería posible, según el coordinador de Servicios de Central del Teletrabajo.
Entre estas nuevas tecnologías se encuentra internet, como red global que facilita la apertura de nuevos mercados, según José María Berenguer, profesor asociado de la Universidad de Navarra.
Por ello, el trabajo desde casa favorecerá la expansión de las empresas, ya que permitirá adentrarse en otros países, otras ciudades y zonas rurales, puesto que el teletrabajo no implica «la necesidad de ubicación en un espacio físico», según Esther Alvarez Rodríguez, quien añade que todo ello facilita «sin duda» la búsqueda de nuevos mercados a un coste menor que en la fórmula tradicional.
Sin embargo, en muchos casos, el centro de trabajo no es la principal causa de la imposibilidad de abrir mercados, según el responsable de Marketing de Trabajadores y e-business de Alta Gestión del Trabajo Temporal, quien añade que en relación al sector fabril, la empresa seguirá debiendo contar con un centro productivo físico y con una logística apropiada a las necesiades del producto y del mercado. Una vez solucionadas estas premisas, la flexibilidad que proporciona una empresa virtual y una correcta estrategia de comercio electrónico facilitarán la entrada a mercados distantes, como concluye David Henche Jiménez.
ÁREAS ECONÓMICAS
Los especialistas estiman que la informática, la comunicación y la contabilidad son, por este orden, las áreas económicas que más puestos de teletrabajo pueden generar. La informática como propulsora de este sistema de trabajo, según la responsable del Departamento de Salidas Profesionales de la Escuela de Negocios IDE-CESEM, y la comunicación, por estar ligada a las nuevas tecnologías y autopistas de la información.
La informática requiere menos presencia física de empleados, por ello es, para Eduardo Sánchez Illana, director de Producción, Comercialización y Empleo de ATAM, el área que más puestos de teletrabajo puede generar. Asimismo, las ramas de la contabilidad y la comunicación no necesitan presencia física para su realización, según Analistas Económicos de Andalucía.
Además, Esther Alvarez Rodríguez añade que se puede hablar del teletrabajo en el sector de la teleeducación o teleformación, el campo de la medicina, que ya ha hecho sus incursiones en esta nueva modalidad en la relación paciente-médico con la posibilidad de hacer chequeos a distancia; el mundo de la consultoría, el ocio y muchos más que se irán adaptando a esta nueva forma de trabajo.
En general, el sector servicios debería ser el primero en implantar el teletrabajo como algo habitual, además de áreas como la consultoría, la comunicación, el marketing, la jurídica o el desarrollo informático que se prestan, según David Henche Jiménez, a adoptar esta nueva tendencia.
Asimismo, para el coordinador de Servicios de Central de Teletrabajo, las áreas de trabajo que más puestos de esta nueva fórmula de empleo pueden generar son las administrativas y de gestión de servicios, ya que «son susceptibles de ser externalizadas».
Dentro del sector industrial, algunas actividades, como la confección, se prestan mucho a realizarse por medio de esta nueva fórmula de trabajo, así como ciertas actividades de manufactura, según el director del Departamento de Relaciones Laborales y Asuntos Sociales de Fomento del Trabajo Nacional.
Por otra parte, hay analistas que estiman que las posibilidades del teletrabajo no se centran tanto en áreas económicas, sino en tipos de trabajo, como el director de la Escuela de Negocios Foro Europeo, José Ramón Lacosta, quien explica que las labores comerciales y directivas de equipos precisan más del contacto físico.
De la misma opinión es el profesor asociado de la Universidad de Navarra José María Berenguer, quien pone como ejemplo el trabajo de progamador, como empleo «apto para teletrabajar» y, en general, los trabajos intelectuales claramente planificables.
DISCAPACITADOS
Pocos expertos estiman que el teletrabajo sea la solución al problema de inserción laboral de los discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar.. Entre los que sí creen que se trata de una gran ayuda para la incorporación al mercado laboral de las personas discapacitadasEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar. se encuentra el profesor de la Universidad San Pablo-CEU Javier Fernández, quien reconoce, sin embargo, que contribuirá a ello.
Para Unión Sindical Obrera puede ser una fórmula de integración de los discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar. entre otros colectivos, pero el director del Centro Confederal de Formación y Acción Social, Carlos Solas Ruiz, considera que no es lo más óptimo para este colectivo desde el punto de vista social, en el sentido de que no es nada positivo para un discapacitadoEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Persona con discapacidad en su lugar. incidir también laboralmente en su «ya normal e injusto» aislamiento que sufre y padece por el simple hecho de su incapacidad.
El teletrabajo permite eliminar las barreras físicas que impiden a este colectivo una normal inserción en el mercado laboral, según el responsable de Marketing de Trabajadores y e-business de Alta Gestión del Trabajo Temporal, pero la solución total debería pasar por un cambio cultural no vinculado a la metodología del trabajo o a su ubicación física.
Se trata, por tanto, de una oferta de opciones profesionales para los discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar., pero no de la «panacea para su inserción laboral», según la responsable del Departamento de Salidas Profesionales de la Escuela de Negocios IDE-CESEM.
El problema de los discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar. no es dónde trabajan ni cómo lo hacen, según José Luis Salido, quien estima que el inconveniente recae en la adaptación del trabajo a esas personas. Además, según Salido, necesitan tener próximos a tutores o encargados que solventen los problemas que puedan surgir. «La eliminación de barreras arquitectónicas, por ejemplo, es mucho más importante», añade el director del Departamento de Relaciones Laborales y Asuntos Sociales de Fomento del Trabajo Nacional.
CONCLUSIONES
– Los analistas creen que aún es necesario realizar una auténtica revolución en la estructura, organización y metodología de una empresa o universidad para extender la utilización del teletrabajo y que las relaciones personales continuarán siendo «muy importantes» en el mundo laboral.
– La principal ventaja de esta nueva fórmula de trabajo es la mayor capacidad para gestionar el tiempo de trabajo y de ocio, ya que no serán necesarios los desplazamientos para acudir a su centro de trabajo, y las jornadas de trabajo no serán tan estrictas.
– El teletrabajo hará que las relaciones sociales disminuyan, por lo que puede llevar al teleempleado a la incomunicación, y que el trabajador confunda la vida privada o familiar por la laboral o trabajo.
– El sentimiento de falta de contacto con la empresa que puede sufrir el teletrabajador es un problema de la propia dirección, quien debe establecer una correcta y continua comunicación con el empleado.
– La empresa ahorrará sobre todo en costes de transportes, mobiliario y comida, pero deberá seguir costeando los equipos y el material de trabajo.
– Las nuevas tecnologías permitirán al teletrabajador abrirse hacia nuevos mercados, pero también a las empresas de trabajo ‘normal’, ya que en una sociedad de la información, el concepto de empresa ceñida a un ámbito territorial es «obsoleto».
– Las áreas de informática, comunicación y contabilidad son las más aptas para aplicar este sistema de trabajo, así como el sector servicios y el de la confección.
– El teletrabajo facilita la incorporación de los discapacitadosEn el SID sugerimos utilizar la palabra o expresión Personas con discapacidad en su lugar. al mercado laboral porque elimina las barreras físicas, pero no es la solución definitiva, ya que el principal inconveniente es su adaptación al trabajo.
EXPERTOS
– David Henche Jiménez, responsable de Marketing de Trabajadores y e-business de Alta Gestión Trabajo Temporal
– José Luis Salido, director del Departamento de Relaciones Laborales y Asuntos Sociales de Fomento del Trabajo Nacional
– Javier Fernández, profesor de Relaciones Humanas de la Universidad San Pablo-CEU
– Eduardo Sánchez Illana, director de Producción, Comercialización y Empleo de la Asociación Telefónica de Asistencia a Minusválidos (ATAM)
– José Ramón Lacosta, director de la Escuela de Negocios Foro Europeo
– José María Berenguer, profesor asociado de la Universidad de Navarra
– Esther Alvarez Rodríguez, responsable del Departamento de Salidas Profesionales de la Escuela de Negocios IDE-CESEM
– Ramón Soler Monells, coordinador de Servicios de Central del Teletrabajo S.L
– Carlos Solas Ruiz, director Centro Confederal de Formación y Acción Social de la Unión Sindical Obrera (USO)
– Analistas Económicos de Andalucía