El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) estableció este martes como “gran reto” que la presencia de las personas con discapacidad llegue en mayor medida a las profesiones de mayor cualificación, mientras que la Federación Española de Centros Especiales de Empleo de Iniciativa Social (Feacem) incidió en que ya se están superando los “miedos” existentes a la hora de realizar contrataciones por parte de las empresas.
Estas ideas se pusieron de relieve durante una mesa redonda enmarcada en la presentación del ‘Informe 9 Odismet’, elaborado por el Observatorio sobre Discapacidad y Mercado de Trabajo de Fundación ONCE e Inserta Empleo con la cofinanciación de la Unión Europea. Precisamente, este proyecto celebró este martes en Madrid su décimo aniversario con un acto público en el Hub de ‘Por Talento Digital’ de Fundación ONCE.
La jefa de Sección del Observatorio de Ocupación de la Subdirección General de Estadística del SEPE, Irene Susana Pastor, alabó que cada vez hay más personas con discapacidad que están cursando formación profesional para el empleo. En su opinión, cuanto mejor es la formación, más “autoconfianza” tienen las personas con discapacidad a la hora de buscar empleo.
Esta experta defendió que “todavía hay mucho que hacer” para seguir reforzando dicha “autoconfianza”, aunque dijo que una “parte de las empresas” todavía tiene que ser “más conscientes de acoger a las personas con discapacidad desde otro lugar”.
Asimismo, señaló que los datos indican que el gran porcentaje de las personas con discapacidad siguen en el sector de la limpieza y en industria manufacturera “y un muy pequeño porcentaje está en puestos cualificados”. Por ello, calificó de “gran reto” el que las personas con discapacidad lleguen en mayor medida a esos puestos.
CAMBIO DE PERCEPCIÓN
Para la directora gerente de Feacem, Pepa Torres, la realidad es “muy compleja” y, pese a que hay datos de evolución del mercado laboral para las personas con discapacidad que no son positivos, se detecta “cómo ha cambiado la percepción social y de las empresas” sobre esta parte de la ciudadanía como trabajadores.
“Esto ha cambiado radicalmente en los últimos años”, enfatizó Torres, quien explicó que “la idea de que las personas con discapacidad pudiéramos ser trabajadoras” la tenían algunas empresas y parte de la sociedad, pero no era “tan generalizada”. Por ello, aventuró que “el compromiso de las empresas, la idea social de que las personas con discapacidad podemos trabajar, podemos aportar” hará que las políticas y programas que se desarrollen en los próximos años consigan “mejores resultados”.
A su juicio, se han “roto” muchos “miedos” y “prejuicios” y, sobre todo las grandes empresas, “adquieren la incorporación de personas con discapacidad o de otros colectivos vulnerables como un compromiso”, ya que su propia estructura se enriquece así.
EL ESTIGMA SE DILUYE
Por su parte, el responsable de Selección de Accenture, David Palomar, apuntó que los datos reflejan “la evolución” de la sociedad, ya que “a día de hoy, parte de ese estigma de una persona con discapacidad se ha ido diluyendo y se pone más énfasis en el talento y menos en la discapacidad”. Igualmente, considera que hay “un compromiso mayor” y “un nivel de madurez en cuanto a conocer más de cerca la discapacidad y evitar esos miedos”, lo que ha generado más oportunidades para un colectivo “que estaba apartado” y que “puede aportar” mucho talento.
Además, los tres ponentes pusieron en valor la formación que se promueve desde Fundación ONCE en materia de nuevas tecnologías, lo que aumenta las posibilidades de empleabilidad de las personas con discapacidad.
De hecho, el directivo de Accenture resaltó que una mayor cualificación facilita que las empresas puedan cumplir con el 2% mínimo de contratación de personas con discapacidad en plantilla y no tener que optar por medidas alternativas.
En otro orden de cosas, Pepa Torres se refirió también al reto del envejecimiento de la población y sostuvo que es “un reto que va a ser muy interesante”, dado que “se va a jubilar muchísima gente y eso puede ser también una oportunidad laboral para nuestro colectivo”.
PERIODISMO DE DATOS
Antes de esta mesa redonda, el director general de Servimedia, José Manuel González Huesa, mantuvo un diálogo con el periodista de datos de referencia en ‘El País’, Kiko Llaneras, quien afirmó que un buen tratamiento de datos ayuda a “tomar buenas decisiones” y lograr objetivos que, en este caso, sería la mayor inclusión laboral de las personas con discapacidad.
Para que llegue la información al público de mejor manera, Llaneras subrayó la “capacidad visual”, en lo que juega un papel importante la utilización de los gráficos. “Hacer una comunicación más fácil no es porque no confíes en quien lo va a leer”, reflexionó este periodista, quien precisó que como se quiere contar algo “complejo” se tiene que hacer “fácil” y “claro”.
Reconoció que existe un “desajuste” entre la proporción de personas a quien le gustan más los números que las letras y la presencia que los primeros tienen en la profesión periodística, que es muy inferior, aunque razonó que “lo que es escasa es la atención”. “Si tienes la atención de la gente, yo escribo asumiendo que mis lectores son inteligentes”, agregó Llaneras.
En esta línea, manifestó que “cuando a la gente le importa un asunto” sí se fija en los datos y pone atención, como sucedió con los datos de la covid-19 durante los peores momentos de la pandemia.
Por último, hizo una alusión a las frecuentes publicaciones que realiza sobre sondeos electorales con los que hace estimaciones de las posibilidades de que gane cada partido y aclaró que, ante todo, hay que reconocer a los lectores que “no se sabe” a ciencia cierta quien va a ser el vencedor en los comicios.