Las alteraciones de conducta son los comportamientos más preocupantes de las personas con TEA, teniendo en cuenta que se producen en todas las etapas vitales y repercuten en la adquisición de aprendizajes, en la inclusión social y educativa y, en definitiva, en su calidad de vida.
En los diferentes entornos (escolar, familiar, social o residencial) son necesarias herramientas basadas en la observación, el registro y el análisis funcional de las conductas, para saber qué las provocan y poder modificar el entorno para prevenirlas. Desde el respeto a las particularidades de las personas en el espectro del autismo, este curso pretende dar a los docentes, familias y profesionales, estas herramientas para afrontar situaciones donde, demasiado a menudo, no sabemos qué hacer.