La atención integral a la población con discapacidad por enfermedad mental requiere de una red de servicios psiquiátricos completa y adecuada, así como de la existencia de una red de equipamientos sociales, bien dimensionados, que atienda las diversas situaciones derivadas de la discapacidad secundaria a dichas condiciones o de las circunstancias sociales adversas que son frecuentes en la evolución de estas patologías.
Con este documento se pretende garantizar la asistencia a toda la población que con esta patología, necesite no solo asistencia psiquiátrica sino también soporte social para desarrollar su vida.