El apoyo activo es una metodología de intervención que persigue dotar a las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo de más oportunidades de participar en la sociedad.
Está muy ligado a la planificación centrada en la persona, pues parte del principio de que toda intervención debe estar orientada por las necesidades y preferencias de cada individuo, y también se encuentra cercano al apoyo conductual positivo, herramienta a la recurre para abordar conductas desafiantes. El apoyo activo se caracteriza por su carácter eminentemente práctico y facilita no solo el empoderamiento de las personas destinatarias, sino la transformación de los servicios y programas tradicionales, con frecuencia asentados sobre la “cultura del déficit” y el asistencialismo. Surgido en el Reino Unido durante las décadas de 1970 y 1980 en el marco del movimiento en favor de la desinstitucionalización, Plena Inclusión comenzó a implementarlo en España en 2016, mediante comunidades de aprendizaje y proyectos piloto. La experiencia acumulada en este proceso constituye la base de la presente guía, que explica con detalle en qué consiste el apoyo activo y cómo implementarlo. Los anexos del libro contienen consejos de aplicación, fichas de registro y ejemplos de planes.