Todos los años, la Defensoría de la Infancia y Adolescencia de Andalucía incide en algún asunto de mayor relevancia social o de actualidad con el claro propósito de visibilizar una problemática emergente y solicitar de los poderes públicos y de la sociedad en general un compromiso de actuación.
Este año se ha decidido analizar la salud mental infantil y juvenil convencidos de la necesidad de poner el enfoque de la salud de nuestras futuras generaciones de personas adultas no solo en el aspecto físico sino también mental.