Esta publicación reconoce la importancia de la digitalización de la cultura para las personas con discapacidad dentro del cumplimiento de su derecho al acceso universal al patrimonio cultural y lingüístico. Más allá de proporcionar una comprensión general de las barreras a las que se enfrentan las personas con discapacidad para acceder al patrimonio documental digitalizado, la publicación ofrece un conjunto de directrices para garantizar que los documentos patrimoniales digitalizados sean accesibles a cualquier persona, independientemente de sus capacidades.
Las directrices ayudan a las partes implicadas en la digitalización de documentos patrimoniales, como bibliotecarios, archiveros, trabajadores de museos, conservadores y otras partes interesadas, a planificar cuidadosamente las plataformas y los contenidos digitales con vistas a incorporar los aspectos relacionados con la discapacidad y la accesibilidad. Siguiendo ciertas normas de accesibilidad e incorporando herramientas de software y hardware de asistencia en la fase de desarrollo, los repositorios del patrimonio documental digital permitirán a las personas con deficiencias visuales, auditivas, motoras o cognitivas acceder a la cultura y participar en ella. Las directrices se han estructurado de forma que faciliten la navegación de los distintos tipos de interesados y la evaluación de los distintos aspectos con los que deben comprometerse. Para ello, se proponen dos tipos de directrices: a) directrices básicas -destinadas a las partes interesadas que encargan plataformas de patrimonio cultural documental- y b) directrices avanzadas -preparadas para los creadores de contenidos de estas plataformas-. Este recurso reitera el compromiso del Sector de Comunicación e Información de la UNESCO de apoyar a los Estados Miembros para garantizar el acceso universal al patrimonio cultural y lingüístico sin dejar a nadie atrás, fortaleciendo las bases de las sociedades del conocimiento mundiales que allanan el camino hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible.