En este libro, el autor se ha centrado en describir cómo ha aprendido a conocer a las personas con síndrome de Down desde el ámbito humano y no, como sucede a menudo, desde una perspectiva médico-psicológica que las presenta como personas enfermas-deficientes. No le interesa el síndrome, sino la individualidad.
“Ser síndrome de Down” significa, sencillamente, ser una persona igual que cualquier otra y que aspira a los mismos deseos de aprendizaje y autonomía que los demás. Los dos capítulos principales abordan, por un lado, cuestiones relativas a la identidad, personalidad y mundo afectivo, por otro, su educación y el concepto de cultura de la diversidad como cambio de paradigma en la educación de estas personas.
Crítica recogida del Boletín del Real Patronato (2000, Abril) 45
Evaluación de la calidad de vida en niños y jóvenes con síndrome de Down
El modelo de Calidad de Vida se encuentra ampliamente extendido y tiene una gran aceptación y aplicación en el mundo de la discapacidad. Numerosos