El pediatra de Atención Primaria es el profesional sanitario que valora en primer lugar al niño con sospecha de trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad (TDAH); es responsable, una vez establecido el diagnóstico, de instaurar y/o seguir un tratamiento óptimo, de eficacia probada por la comunidad científica, personalizado para minimizar los riesgos, coste-efectivo y que respete las opiniones de los pacientes informados. Método: se presenta una revisión bibliográfica actualizada y resumida de los últimos diez años sobre las evidencias científicas disponibles en relación con la eficacia, la seguridad, la eficiencia y otros aspectos del manejo del tratamiento del TDAH con el objetivo de facilitar la toma de decisiones en el ámbito de la Atención Primaria.
Resultados: el niño con TDAH presenta una morbilidad importante y debe ser tratado. Los pilares del tratamiento son: plan de acción, educación, tratamiento farmacológico, no farmacológico y revisiones periódicas. En el niño con TDAH puro el tratamiento de elección es el metilfenidato por su eficacia, seguridad y coste-efectividad. Las intervenciones psicosociales se recomiendan para el tratamiento de los problemas de conducta comórbidos y en familias disfuncionales. Los trastornos de aprendizaje deben ser evaluados y tratados en su centro escolar. Las revisiones periódicas son necesarias para monitorizar los resultados del tratamiento e identificar barreras para su adherencia. El paciente será derivado a Atención Especializada si el tratamiento correctamente establecido no cumple los objetivos o requiere recursos no disponibles en Atención Primaria.
Resumen tomado de la revista